Flash Gordon es una película de acción, ciencia ficción y aventuras dirigida por Mike Hodges, y basada en el superhéroe de cómic homónimo creado por Alex Raymond para la editorial King Features.
Producida por Dino De Laurentiis y estrenada en 1980, la película Flash Gordon está protagonizada por Sam J. Jones, Melody Anderson, Chaim Topol, Max von Sydow, Timothy Dalton, Brian Blessed y Ornella Muti en los papeles principales.
La trama del film tiene como protagonista a Flash Gordon (Sam J. Jones), una estrella del fútbol americano que junto a su amiga Dale Arden (Melody Anderson) acaban en la cápsula espacial del doctor Hans Zarkov (Chaim Topol) un científico expulsado de la NASA. Los tres viajan a un extraño planeta donde intentarán salvar a la tierra de la amenaza de Ming (Max von Sydow), el emperador del lejano reino Mongo.
Con un presupuesto de 20 millones de dólares y un caótico rodaje, esta adaptación al cine de Flash Gordon no obtuvo demasiado éxito en taquilla, sin embargo el film se convirtió en una auténtica película de culto, gracias a su particular estética, similar a la clásica serie Batman de los años 60 para atraer a los fans de los cómics, y su exitosa banda sonora, creada por la banda de rock Queen.
Flash Gordon, rodaje y curiosidades
Las historietas de Flash Gordon llevaban levantando el interés de varios conocidos productores y directores de cine desde tiempo atrás. Uno de los primeros que intentó llevar el personaje a la gran pantalla fue el director George Lucas, quien a mediados de la década de los 70 intentó hacer el primer largometraje de Flash Gordon, ya que hasta entonces todas las adaptaciones eran series para televisión y dibujos animados.
Lucas no consiguió los derechos sobre el personaje debido a que el productor Dino De Laurentiis se le había adelantado, por lo que decidió hacer "La Guerra de las Galaxias" (1977) en su lugar.
La idea inicial del productor De Laurentiis era que el director Federico Fellini dirigiera la película, sin embargo éste se negó a pesar de tener una estrecha relación con el cómic (participó en una de las historietas de Flash Gordon ambientada en la Segunda Guerra Mundial). De Laurentiis contrató entonces al director británico Nicolas Roeg, un gran admirador de los cómics originales de Alex Raymond. Tras un año de pre-producción, De Laurentiis le comunicó que no estaba contento con el trabajo por el tratamiento que se le estaba dando al personaje de Flash Gordon, así que Roeg acabó abandonando el proyecto.
Se ofreció el puesto de director a Sergio Leone, quien lo rechazó alegando que el guión no era fiel al cómic original. De Laurentiis acabó contratando a Mike Hodges, quien finalmente se convertiría en el director definitivo de Flash Gordon.
El guión del film era una adaptación de los cómics realizado por Michael Allin y Lorenzo Semple Jr. Se trataba de una adaptación bastante libre y al que se añadieron, por orden del productor, muchos elementos cómicos que no están en las historietas originales. Según comentaron los guionistas tras el estreno, a De Laurentiis simplemente le pareció buena idea hacer de Flash Gordon un personaje divertido para la película.
Uno de los actores que se postuló para el papel protagonista de Flash Gordon fue Arnold Schwarzenegger, pero no fue contratado debido a su marcado acento austriaco. Dino De Laurentiis quería como actor protagonista a Kurt Russell, pero éste lo rechazó porque consideraba que el personaje carecía de personalidad, protagonizando poco después "1997: Rescate en Nueva York" (1981). Finalmente fue Sam J. Jones, un actor prácticamente desconocido por entonces, quien acabaría consiguiendo el papel.
Para el personaje de Dale Arden, el papel femenino principal, se hicieron pruebas a decenas de actrices, y aunque inicialmente se había elegido a la modelo Dayle Haddon, al parecer hubo algún problema inesperado en la contratación. Melody Anderson, una de las actrices que más convenció a los productores durante las audiciones, recibió una llamada mientras estaba en Nueva York para que volara a Londres al día siguiente, cuando comenzaba la filmación.
El rodaje de Flash Gordon comenzó oficialmente el 6 de agosto de 1979 rodándose por completo en Reino Unido. Entre algunas de las localizaciones del film, se rodó en el aeródromo de Broadford de la isla de Skye (Escocia), o en el parque industrial Brooklands en Inglaterra, aunque la mayor parte de la filmación se realizó en los estudios EMI Elstree Studios de Borehamwood y en los estudios Shepperton Studio Centre de Chertsey, ambos en Inglaterra.
Para adaptar mejor los personajes a los cómics, se decoloró el pelo oscuro de Sam J. Jones a rubio y se tiñó el cabello rubio de Melody Anderson a marrón. Flash debía tener además los ojos azules pero Jones no podía usar las lentes de contacto. Max Von Sydow por su parte se afeitó la cabeza por el papel de Ming el despiadado.
La mayoría de los sets de rodaje y decorados se construyeron en cartón, y buena parte de los efectos especiales de Flash Gordon consistían en una pantalla azul detrás de los actores para crear la secuencias voladoras, con el estudio plagado de cables colgando, colchones en el suelo y máquinas de viento.
La escena de la batalla en el aire de los hombres halcón atacando la nave Ajax, llevó tres días de preparación, y una vez rodada hubo que repetir la escena debido a que el actor Brian Blessed (Príncipe Vultan) estaba haciendo sus propios ruidos de disparos con su arma de cartón.
La parte de vestuario fue un auténtico quebradero de cabeza para algunos miembros del equipo, especialmente para el actor Max von Sydow. El traje del emperador Ming que tuvo que llevar durante la filmación Max von Sydow pesaba más de 30 kilos, por lo que el actor solo lo podía llevar puesto unos 10 minutos antes de tener que quitárselo para descansar.
Los actores que interpretaban a los hombres halcón también tuvieron bastantes problemas con los trajes, debido a que no podían sentarse a descansar con ellos puestos. Las alas del traje se les clavaban en la espalda si se sentaban, así que los descansos los hacían tumbados boca abajo.
En general la producción de Flash Gordon estuvo plagada de problemas, improvisándose además muchas de las escenas y diálogos. Entre ellas, la escena en la que el príncipe Vultan (Brian Blessed) persigue a Dale Arden, manteniéndose en el metraje la genuina reacción de Melody Anderson en el momento; o una de las escenas finales en las que Flash salta a la cámara gritando "Yeah!", que se mantuvo porque nadie sabía en realidad cómo terminar la película.
Por momentos, la falta de coordinación entre los miembros del equipo era total, algo de lo que se culpó en gran parte al productor. De Laurentiis trajo casi todos los miembros del equipo de producción desde Italia, y muchos de ellos no hablaban bien inglés, por lo que los malentendidos entre actores, director y guionistas con el equipo de producción fueron constantes.
En una de las escenas de sueños del personaje de Dale, interpretaron erróneamente que la actriz se tenía que transformar en una araña gigante, por lo que Melody Anderson se pasó seis horas en maquillaje pintándose de verde, usando lentillas y colmillos falsos para caracterizarse, y finalmente una máscara de casi 10 kilos de peso en la cabeza. Cuando el director lo vio simplemente comentó "Ha quedado magnífico, pero no podemos usarlo porque no tiene nada que ver con el guión".
Según confesó el guionista Lorenzo Semple, Jr., por momentos la película estaba descontrolada, algo que se puede apreciar tanto en el resultado global, como en pequeños errores y detalles en el film que muestran la falta de cuidado, como algunos errores de continuidad o escenas en las que se pueden ver los cables de los que cuelgan los actores.
Un pequeño ejemplo de esta falta de cuidado general es en las escenas iniciales. Flash Gordon lleva un reloj de pulsera Seiko, pero cuando llega a Mongo el reloj desaparece misteriosamente. Aunque seguramente el mejor ejemplo de todos es la escena en la que Flash sube a la nave lanzadera con la princesa Aura (Ornella Muti).
En esta secuencia, Aura le explica a Flash cómo funcionan los controles de la nave, con la palanca izquierda para la dirección y la derecha para la altitud. Nada de esto se cumple a medida que avanzan con la nave y accionan las palancas, y de haberlo hecho la nave se hubiera estrellado contra Aquarius, el reino que estaban atravesando en ese momento.
El desastre de escena con la nave no acaba ahí. Poco después, cuando Flash se encuentra con Dale, usa la palanca incorrecta para entrar en Fridgia y cuando en la siguiente escena va a usar finalmente la palanca correcta con su mano derecha, la palanca ha cambiado mágicamente de posición, en un claro error de continuidad.
Durante todo el rodaje, el actor Sam J. Jones tuvo una relación difícil con el productor Dino De Laurentiis, y cuando acabó la parte de la filmación en diciembre de 1979, ambos tuvieron un nuevo desacuerdo, en este caso por dinero. Sam J. Jones acabó explotando y abandonó durante la etapa de postproducción, por lo que algunos diálogos que se tenían que añadir los dobló un actor de voz profesional.
Casi todos los miembros del reparto habían firmado para varias películas, pero los problemas durante el rodaje entre actor protagonista y productor, a los que se sumó el discreto resultado en taquilla, provocaron que finalmente no se rodara ninguna secuela.
Se llegó incluso a dejar un final abierto, en el que se ve una mano que recoge el anillo de Ming. Esta mano es supuestamente del general Klytus (Peter Wyngarde), quien a pesar de morir en la película obtiene un nuevo cuerpo y se iba a convertir en el villano principal de la secuela.
No todo fueron errores o problemas, y sin duda uno de los grandes aciertos del film fue la contratación de Queen para la banda sonora. Dino De Laurentiis en realidad no conocía a la banda británica, y fue el propio manager del grupo quien se acercó al productor para proponer una reunión, en la que sería la primera película para la que Queen hizo la banda sonora. Por su parte, el director Mike Hodges había propuesto inicialmente a Pink Floyd para la música.
Como dato curioso para los amantes de los Huevos de Pascua de películas, en una de las escenas del film el príncipe Vultan dice "¿Quién quiere vivir para siempre?" (Who wants to live forever?), una frase que sería el título años después de una de las canciones más conocidas del grupo británico y que además formó parte de la banda sonora de "Los inmortales" (1986).
Con un coste de producción que superó finalmente los 25 millones de dólares, la película Flash Gordon se estrenó en cines el 5 de diciembre de 1980. Aunque acabó cubriendo costes y dejando beneficios, su paso por taquilla fue bastante discreto, con la excepción de los cines de Reino Unido, donde el film tuvo una gran acogida.
A pesar de todo, esta adaptación a la gran pantalla de Flash Gordon no tardó en conseguir el estatus de película de culto, convirtiéndose en un clásico para los amantes de la ciencia ficción o la fantasía, y en un símbolo de la cultura popular, recibiendo guiños constantes en películas, libros, series, cómics y videojuegos.
Producida por Dino De Laurentiis y estrenada en 1980, la película Flash Gordon está protagonizada por Sam J. Jones, Melody Anderson, Chaim Topol, Max von Sydow, Timothy Dalton, Brian Blessed y Ornella Muti en los papeles principales.
La trama del film tiene como protagonista a Flash Gordon (Sam J. Jones), una estrella del fútbol americano que junto a su amiga Dale Arden (Melody Anderson) acaban en la cápsula espacial del doctor Hans Zarkov (Chaim Topol) un científico expulsado de la NASA. Los tres viajan a un extraño planeta donde intentarán salvar a la tierra de la amenaza de Ming (Max von Sydow), el emperador del lejano reino Mongo.
Con un presupuesto de 20 millones de dólares y un caótico rodaje, esta adaptación al cine de Flash Gordon no obtuvo demasiado éxito en taquilla, sin embargo el film se convirtió en una auténtica película de culto, gracias a su particular estética, similar a la clásica serie Batman de los años 60 para atraer a los fans de los cómics, y su exitosa banda sonora, creada por la banda de rock Queen.
Flash Gordon, rodaje y curiosidades
Las historietas de Flash Gordon llevaban levantando el interés de varios conocidos productores y directores de cine desde tiempo atrás. Uno de los primeros que intentó llevar el personaje a la gran pantalla fue el director George Lucas, quien a mediados de la década de los 70 intentó hacer el primer largometraje de Flash Gordon, ya que hasta entonces todas las adaptaciones eran series para televisión y dibujos animados.
Lucas no consiguió los derechos sobre el personaje debido a que el productor Dino De Laurentiis se le había adelantado, por lo que decidió hacer "La Guerra de las Galaxias" (1977) en su lugar.
La idea inicial del productor De Laurentiis era que el director Federico Fellini dirigiera la película, sin embargo éste se negó a pesar de tener una estrecha relación con el cómic (participó en una de las historietas de Flash Gordon ambientada en la Segunda Guerra Mundial). De Laurentiis contrató entonces al director británico Nicolas Roeg, un gran admirador de los cómics originales de Alex Raymond. Tras un año de pre-producción, De Laurentiis le comunicó que no estaba contento con el trabajo por el tratamiento que se le estaba dando al personaje de Flash Gordon, así que Roeg acabó abandonando el proyecto.
Se ofreció el puesto de director a Sergio Leone, quien lo rechazó alegando que el guión no era fiel al cómic original. De Laurentiis acabó contratando a Mike Hodges, quien finalmente se convertiría en el director definitivo de Flash Gordon.
El guión del film era una adaptación de los cómics realizado por Michael Allin y Lorenzo Semple Jr. Se trataba de una adaptación bastante libre y al que se añadieron, por orden del productor, muchos elementos cómicos que no están en las historietas originales. Según comentaron los guionistas tras el estreno, a De Laurentiis simplemente le pareció buena idea hacer de Flash Gordon un personaje divertido para la película.
Uno de los actores que se postuló para el papel protagonista de Flash Gordon fue Arnold Schwarzenegger, pero no fue contratado debido a su marcado acento austriaco. Dino De Laurentiis quería como actor protagonista a Kurt Russell, pero éste lo rechazó porque consideraba que el personaje carecía de personalidad, protagonizando poco después "1997: Rescate en Nueva York" (1981). Finalmente fue Sam J. Jones, un actor prácticamente desconocido por entonces, quien acabaría consiguiendo el papel.
Para el personaje de Dale Arden, el papel femenino principal, se hicieron pruebas a decenas de actrices, y aunque inicialmente se había elegido a la modelo Dayle Haddon, al parecer hubo algún problema inesperado en la contratación. Melody Anderson, una de las actrices que más convenció a los productores durante las audiciones, recibió una llamada mientras estaba en Nueva York para que volara a Londres al día siguiente, cuando comenzaba la filmación.
El rodaje de Flash Gordon comenzó oficialmente el 6 de agosto de 1979 rodándose por completo en Reino Unido. Entre algunas de las localizaciones del film, se rodó en el aeródromo de Broadford de la isla de Skye (Escocia), o en el parque industrial Brooklands en Inglaterra, aunque la mayor parte de la filmación se realizó en los estudios EMI Elstree Studios de Borehamwood y en los estudios Shepperton Studio Centre de Chertsey, ambos en Inglaterra.
Para adaptar mejor los personajes a los cómics, se decoloró el pelo oscuro de Sam J. Jones a rubio y se tiñó el cabello rubio de Melody Anderson a marrón. Flash debía tener además los ojos azules pero Jones no podía usar las lentes de contacto. Max Von Sydow por su parte se afeitó la cabeza por el papel de Ming el despiadado.
La mayoría de los sets de rodaje y decorados se construyeron en cartón, y buena parte de los efectos especiales de Flash Gordon consistían en una pantalla azul detrás de los actores para crear la secuencias voladoras, con el estudio plagado de cables colgando, colchones en el suelo y máquinas de viento.
La escena de la batalla en el aire de los hombres halcón atacando la nave Ajax, llevó tres días de preparación, y una vez rodada hubo que repetir la escena debido a que el actor Brian Blessed (Príncipe Vultan) estaba haciendo sus propios ruidos de disparos con su arma de cartón.
La parte de vestuario fue un auténtico quebradero de cabeza para algunos miembros del equipo, especialmente para el actor Max von Sydow. El traje del emperador Ming que tuvo que llevar durante la filmación Max von Sydow pesaba más de 30 kilos, por lo que el actor solo lo podía llevar puesto unos 10 minutos antes de tener que quitárselo para descansar.
Los actores que interpretaban a los hombres halcón también tuvieron bastantes problemas con los trajes, debido a que no podían sentarse a descansar con ellos puestos. Las alas del traje se les clavaban en la espalda si se sentaban, así que los descansos los hacían tumbados boca abajo.
En general la producción de Flash Gordon estuvo plagada de problemas, improvisándose además muchas de las escenas y diálogos. Entre ellas, la escena en la que el príncipe Vultan (Brian Blessed) persigue a Dale Arden, manteniéndose en el metraje la genuina reacción de Melody Anderson en el momento; o una de las escenas finales en las que Flash salta a la cámara gritando "Yeah!", que se mantuvo porque nadie sabía en realidad cómo terminar la película.
Por momentos, la falta de coordinación entre los miembros del equipo era total, algo de lo que se culpó en gran parte al productor. De Laurentiis trajo casi todos los miembros del equipo de producción desde Italia, y muchos de ellos no hablaban bien inglés, por lo que los malentendidos entre actores, director y guionistas con el equipo de producción fueron constantes.
En una de las escenas de sueños del personaje de Dale, interpretaron erróneamente que la actriz se tenía que transformar en una araña gigante, por lo que Melody Anderson se pasó seis horas en maquillaje pintándose de verde, usando lentillas y colmillos falsos para caracterizarse, y finalmente una máscara de casi 10 kilos de peso en la cabeza. Cuando el director lo vio simplemente comentó "Ha quedado magnífico, pero no podemos usarlo porque no tiene nada que ver con el guión".
Según confesó el guionista Lorenzo Semple, Jr., por momentos la película estaba descontrolada, algo que se puede apreciar tanto en el resultado global, como en pequeños errores y detalles en el film que muestran la falta de cuidado, como algunos errores de continuidad o escenas en las que se pueden ver los cables de los que cuelgan los actores.
Un pequeño ejemplo de esta falta de cuidado general es en las escenas iniciales. Flash Gordon lleva un reloj de pulsera Seiko, pero cuando llega a Mongo el reloj desaparece misteriosamente. Aunque seguramente el mejor ejemplo de todos es la escena en la que Flash sube a la nave lanzadera con la princesa Aura (Ornella Muti).
En esta secuencia, Aura le explica a Flash cómo funcionan los controles de la nave, con la palanca izquierda para la dirección y la derecha para la altitud. Nada de esto se cumple a medida que avanzan con la nave y accionan las palancas, y de haberlo hecho la nave se hubiera estrellado contra Aquarius, el reino que estaban atravesando en ese momento.
El desastre de escena con la nave no acaba ahí. Poco después, cuando Flash se encuentra con Dale, usa la palanca incorrecta para entrar en Fridgia y cuando en la siguiente escena va a usar finalmente la palanca correcta con su mano derecha, la palanca ha cambiado mágicamente de posición, en un claro error de continuidad.
Durante todo el rodaje, el actor Sam J. Jones tuvo una relación difícil con el productor Dino De Laurentiis, y cuando acabó la parte de la filmación en diciembre de 1979, ambos tuvieron un nuevo desacuerdo, en este caso por dinero. Sam J. Jones acabó explotando y abandonó durante la etapa de postproducción, por lo que algunos diálogos que se tenían que añadir los dobló un actor de voz profesional.
Casi todos los miembros del reparto habían firmado para varias películas, pero los problemas durante el rodaje entre actor protagonista y productor, a los que se sumó el discreto resultado en taquilla, provocaron que finalmente no se rodara ninguna secuela.
Se llegó incluso a dejar un final abierto, en el que se ve una mano que recoge el anillo de Ming. Esta mano es supuestamente del general Klytus (Peter Wyngarde), quien a pesar de morir en la película obtiene un nuevo cuerpo y se iba a convertir en el villano principal de la secuela.
No todo fueron errores o problemas, y sin duda uno de los grandes aciertos del film fue la contratación de Queen para la banda sonora. Dino De Laurentiis en realidad no conocía a la banda británica, y fue el propio manager del grupo quien se acercó al productor para proponer una reunión, en la que sería la primera película para la que Queen hizo la banda sonora. Por su parte, el director Mike Hodges había propuesto inicialmente a Pink Floyd para la música.
Como dato curioso para los amantes de los Huevos de Pascua de películas, en una de las escenas del film el príncipe Vultan dice "¿Quién quiere vivir para siempre?" (Who wants to live forever?), una frase que sería el título años después de una de las canciones más conocidas del grupo británico y que además formó parte de la banda sonora de "Los inmortales" (1986).
Con un coste de producción que superó finalmente los 25 millones de dólares, la película Flash Gordon se estrenó en cines el 5 de diciembre de 1980. Aunque acabó cubriendo costes y dejando beneficios, su paso por taquilla fue bastante discreto, con la excepción de los cines de Reino Unido, donde el film tuvo una gran acogida.
A pesar de todo, esta adaptación a la gran pantalla de Flash Gordon no tardó en conseguir el estatus de película de culto, convirtiéndose en un clásico para los amantes de la ciencia ficción o la fantasía, y en un símbolo de la cultura popular, recibiendo guiños constantes en películas, libros, series, cómics y videojuegos.
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