Fotografías del rodaje de Jóvenes ocultos (The Lost Boys)

Jóvenes ocultos (The Lost Boys) es un película de terror y comedia dirigida por Joel Schumacher y estrenada en 1987, con un reparto formado en su mayor parte por jóvenes actores relativamente desconocidos por entonces, entre los que se incluyen Corey Feldman, Jami Gertz, Corey Haim, Edward Herrmann, Barnard Hughes, Jason Patric, Kiefer Sutherland, Jamison Newlander y Dianne Wiest.

La trama de la película tiene como protagonistas a Sam (Corey Haim) y Michael Emerson (Jason Patric), dos hermanos que tras el divorcio de sus padres se mudan con su madre a Santa Carla, en California, una ciudad aparentemente tranquila, pero donde corren rumores sobre la existencia de vampiros. Al poco tiempo de llegar, la personalidad de Michael cambia considerablemente cuando empieza a salir con una banda de moteros cuyo líder es el carismático David (Kiefer Sutherland).

Con un prespuesto de 8.500.000 dólares, el rodaje de Jóvenes ocultos se realizó íntegramente en California y fue realmente rápido, ya que la filmación principal se completó en apenas tres semanas, entre el 2 de junio y el 23 de junio de 1986. La localización principal del film se sitúa en la ciudad californiana de Santa Cruz, renombrada como Santa Carla en la película, una localidad que fue conocida en su día como "La capital mundial del asesinato" debido a una serie de brutales asesinatos perpetrados por tres hombres a principios de la década de 1970.

Para el elenco de la película, el director Joel Schumacher decidió apostar por una serie de actores jóvenes que fueran aún poco conocidos para el gran público. Si bien alguno de ellos ya gozaban de cierta fama por entonces, como Corey Feldman tras su papel en "Los Goonies" (1985), para la mayoría era su primer papel importante en el cine. El director animó además al elenco a "participar creativamente" en la realización de la película.

Como curiosidad, miles de residentes locales respondieron al casting cuando se anunció el rodaje en Santa Cruz, donde se buscaban a las típicas familias americanas de la época, gente de la calle, punks, surfistas, patinadores y un "hippie con muerte cerebral". Unos 2.000 solicitantes fueron contratados para trabajar varias noches en la que fue la mayor producción cinematográfica jamás realizada en la zona hasta ese momento.

La película Jóvenes ocultos se estrenó en cines en el verano de 1987 y fue un éxito comercial, recaudando más de 30 millones de dólares en la taquilla norteamericana. La película recibió además buenas críticas y es considerada actualmente una película de culto debido a su importante influencia en el género de las películas de vampiros y a su forma de representarlos posteriormente tanto en el cine como en la cultura popular.