El último Boy Scout, rodaje y curiosidades

El último Boy Scout (The Last Boy Scout) es una película de acción y comedia dirigida por Tony Scott, protagonizada por Bruce Willis y Damon Wayans, y estrenada en 1991.  

Rodaje y curiosidades de El último Boy Scout
El argumento del film tiene como protagonista principal a Joe Hallenbeck (Bruce Willis), un detective privado y ex agente del servicio secreto del presidente norteamericano Jimmy Carter. Joe acepta un trabajo para proteger a Cory (Halle Berry), sin embargo la joven es asesinada, por lo que Joe se marca como objetivo encontrar a los responsables de su muerte. En su búsqueda se unirá Jimmy Dix (Damon Wayans), una ex-estrella del fútbol americano y novio de Cory. 

Con un coste final de 43 millones de dólares, el rodaje de El último Boy Scout estuvo lleno de problemas, principalmente por las continuas discusiones y desavenencias entre los actores, los productores y el director Tony Scott. 

La película tampoco cosechó muy buenas críticas tras su estreno, pero su estilo de "Buddy Cop Film", combinando acción y comedia, muy popular en la época gracias a films como "Arma Letal" (1987), la convirtieron en un éxito de taquilla, recaudando más de 114 millones de dólares en cines, y es para muchos un auténtico clásico de culto dentro del género. 

Rodaje y curiosidades de "El último Boy Scout"

La historia de la película se basa en un guion escrito por Shane Black, quien había sido también el guionista de las dos primeras entregas de la saga Arma Letal y posteriormente escribiría el guion de "El último gran héroe" (1993). 

Shane había pasado por una época difícil en su vida tras la ruptura con su pareja, y llevaba más de dos años tomándose un descanso,  cuando decidió lanzarse de nuevo a escribir un guion, con un personaje basado en parte en su propia amargura tras el fin de la relación. 

A pesar de que la historia no era especialmente novedosa y guardaba considerables similitudes con sus trabajos anteriores, su éxito como guionista le avalaban. Diversos estudios pujaron por comprar la historia y el guion de El último Boy Scout se acabó vendiendo por una cantidad récord de 1,75 millones de dólares. La compañía que lo consiguió fue The Geffen Film Company, a la que se unió la empresa del conocido productor Joel Silver para producir el film.   

Joel Silver y Shane Black durante el rodaje de El último Boy Scout
Shane Black se convirtió así en el primer escritor en vender un guion por más de un millón de dólares, y el récord podía haber sido incluso mayor, ya que Carolco Pictures llegó a ofrecer hasta 2,25 millones por comprar los derechos, pero el guionista quería trabajar con Joel Silver. En todo caso, el récord no duró demasiado tiempo. Pocas semanas después se vendía otro guion en Hollywood por 3 millones de dólares, una historia que se llevaría a la pantalla con el título de "Instinto Básico" (1992). 

El rodaje de El último Boy Scout comenzó oficialmente en marzo de 1991, terminando en junio del mismo año. La filmación se realizó en su totalidad en California, principalmente en varias localizaciones de Los Ángeles, como Hollywood, Beverly Hills o el Memorial Coliseum. También se filmaron algunas escenas en Long Beach, y en el Qualcomm Stadium de San Diego. 

La producción se caracterizó por los continuos problemas y conflictos personales que hubo durante la filmación. Las discusiones entre Bruce Willis, el productor Joel Silver, el director Tony Scott y el guionista Shane Black fueron constantes durante todo el rodaje. Por si fuera poco, la relación entre los dos actores protagonistas, Bruce Willis y Damon Wayans, también era muy tensa, ya que odiaban trabajar juntos. 

El resto del equipo, que intentaba mantenerse al margen de las discusiones, achacó los problemas a un choque de egos o, como comentó el asistente de dirección James Skotchdopole, a una excesiva presencia de "machos alfa" en el proyecto. La mayoría de los implicados se encontraban en la cumbre de su carrera y al parecer cada uno de ellos quería imponer su propia visión de la película y lo que había que hacer. 

Como consecuencia, el escritor Shane Black tuvo que reescribir el guion varias veces sobre la marcha y, cuando finalmente se estrenó la película, tanto él como Tony Scott comentaron que el guion original era mucho mejor que el metraje final que se llevó a los cines. 

Uno de los cambios principales del guion fue en relación al papel de Bruce Willis. Tras una dura negociación, el estudio consiguió finalmente que el actor firmara como protagonista (la primera opción del estudio había sido Jack Nicholson), pero la idea que ambas partes tenían era muy diferente. El estudio pretendía hacer una especie de continuación de "Jungla de cristal" (Die Hard), donde Willis tenía que salvar nuevamente a su esposa. El actor se negó y hubo que hacer cambios en el guion para minimizar el papel de la esposa en la película y se cambió también completamente el final. 

El último Boy Scout detrás de las cámaras
Como curiosidad muy poco conocida, Tony Scott acabó tan harto de trabajar con Joel Silver, que en su siguiente película, "Amor a quemarropa" (1993), basó en el productor el personaje de Lee Donowitz, un productor de películas, consumidor y traficante de cocaína, al que caracterizó e  hizo actuar como el propio Joel Silver para que se viera reflejado. 

Probablemente, el momento más difícil del rodaje, se produjo durante la filmación de una escena que tenía lugar en el Coliseum de Los Ángeles. El primer día que se filmó allí todo transcurrió con normalidad, sin embargo, cuando se iba a filmar al día siguiente, se decidió en el último momento cancelar las tomas, sin informar a los cientos de extras que habían sido contratados para ello. Cuando se presentaron allí y se les informó que tampoco se les iba a pagar ese día, comenzaron a lanzarse contra las barreras del set de rodaje, volviéndose la situación caótica. Fueron finalmente los antidisturbios quienes tuvieron que acudir al lugar rápidamente para dispersar a la multitud y resolver la situación.

Los problemas no acabaron una vez finalizó el rodaje, y durante el proceso de postproducción surgieron nuevos focos de conflictos. Tony Scott era un director conocido por filmar una gran cantidad de metraje para cada película, abordando cada escena con múltiples cámaras para tener la mayor cobertura posible y posteriormente elegir la mejor. 

Con El último Boy Scout se superó a sí mismo en este sentido, y los editores se encontraron ante una ingente cantidad de material como pocas veces antes habían visto en un film. Se realizaron varias ediciones de la película que no convencieron ni a los ejecutivos del estudio ni a los espectadores de las proyecciones de prueba, por lo que acabaron despedidos y hubo que volver a empezar. 

Se contrató al editor Stuart Baird, quien fue finalmente el que consiguió hacer la edición del metraje final que convenció a los ejecutivos del estudio, aunque posteriormente hubo que hacer algunos cortes y modificaciones añadidas en las escenas más gráficas de muertes del film para que no fuera calificada como "NC-17". 

Halle Berry en el rodaje de El último Boy Scout
El metraje final acabó siendo muy diferente al guion original, que era con un tono más oscuro, más violento, y daba un mayor peso en la trama a Milo y Sheldon Marcone, los villanos principales. Además se eliminaron varias escenas del guion, como una persecución en lancha que acababa con un espectacular explosión, varios tiroteos, una secuencia en la que Joe salva a su esposa de ser asesinada por Milo con una motosierra, o una escena de sexo entre Jimmy y Cory (entre otros motivos porque Halle Berry no accedió a salir desnuda en pantalla).  

La película El último Boy Scout se estrenó en los cines de Estados Unidos el 13 de diciembre de 1991. El film había superado el presupuesto inicial, con un coste final de 43 millones de dólares, y no obtuvo críticas especialmente positivas, pero se convirtió rápidamente en un éxito comercial, recaudando cerca de 115 millones de dólares en todo el mundo. 

Lo cierto es que las críticas a la película han mejorado con el paso del tiempo. En la actualidad se considera a El último Boy Scout como una película de culto, y uno de los mejores ejemplos del género "Buddy Cop", gracias a su humor, sus escenas de acción y, curiosamente, a la química que se ve en pantalla entre los dos protagonistas, Willis y Wayans, quienes a duras penas se podían aguantar detrás de las cámaras. 

Como última curiosidad y para los amantes de los Huevos de Pascua de películas, durante el film hay varios guiños a la película Arma Letal (1987), que también fue escrita por Shane Black y producida por Joel Silver, además de una curiosa relación entre estas películas y "Jungla de cristal" (1988). 

La escena en la que Darian (Danielle Harris), está viendo la televisión, la película en pantalla es "Arma Letal", concretamente la secuencia en la que Mel Gibson es torturado por Al Leong, un actor que también interpreta uno de los criminales en Jungla de Cristal. En otra escena del film, se produce una conversación entre Joe y Jimmy sobre los pantalones que usa de 650 dólares. Si bien la conversación no tiene mayor trascendencia, se trata de una escena eliminada de Arma Letal que no se incluyó en el metraje final, con una conversación similar entre Murtaugh y su hija. 

Para completar este curioso triángulo, a Mel Gibson se le ofreció el papel de John McClane en "Jungla de cristal" y al parecer fue también considerado para interpretar al personaje de Jimmy Dix en El último Boy Scout, mientras que a Bruce Willis se le había ofrecido originalmente el papel de Martin Riggs en "Arma Letal". 


Póster película El último Boy Scout

Fotografías del proceso de maquillaje y caracterización para El planeta de los simios (1968)

El planeta de los simios (Planet of the Apes) es una película de ciencia ficción dirigida por Franklin J. Schaffner, estrenada en 1968, cuyo argumento es una adaptación libre de la novela francesa "La Planète des Singes". El film está protagonizado por Charlton Heston, Roddy McDowall, Kim Hunter, Maurice Evans, James Whitmore, James Daly y Linda Harrison en los papeles principales. 

El rodaje de El planeta de los simios se desarrolló entre mayo y agosto de 1967 en diversas localizaciones de California, Utah y Arizona, con secuencias en el desierto filmadas en el lago Powell y sus alrededores, en el Área Recreativa Nacional de Glen Canyon. 

Además de ser un gran éxito comercial y obtener el reconocimiento de crítica y público, con dos nominaciones a los Oscar por su banda sonora y vestuario, la película fue reconocida como un film pionero por sus técnicas de maquillaje protésico, realizado por el artista John Chambers, encargado también del diseño de vestuario. El maquillaje y el vestuario fueron de hecho los apartados más costosos de la producción, ya que supusieron cerca del 17% del presupuesto final de 5,8 millones de dólares. 

El proceso de maquillaje y caracterización para la película era bastante complejo, exigente y muy incómodo para los actores. No solo requería largas sesiones, sino que además los actores debían permanecer con el maquillaje y las prótesis durante horas, sin poder quitárselo ni en los descansos para comer. Algunos actores, como Edward G. Robinson, quien iba a interpretar originalmente al Dr. Zaius, se echaron atrás y rechazaron el papel cuando supieron a lo que se tenían que enfrentar cada día antes de comenzar la filmación. El papel acabó recayendo en Maurice Evans, quien no mostró ninguna queja sobre esta parte de la producción, y aguantó estoicamente las largas e incómodas sesiones de maquillaje. 

Los materiales para las prótesis incluían principalmente espuma y adhesivo, que eran relativamente económicos y fáciles de conseguir en ese momento. Chambers estaba decidido a darle al público algo que nunca antes había visto y simplemente podía usar cualquier material que le dieran. Gracias a su talento natural, convirtió sencillos trozos de espuma en simios con apariencia humana. Pocos ponen en duda que la caracterización conseguida por el equipo de la película fue en gran parte responsable de convertir a El planeta de los simios en un enorme éxito y en una de las películas más recordadas de la historia del cine. 

Como curiosidad, aunque el film no ganó ninguna de las dos estatuillas a las que fue nominado, la Academia de Cine de Hollywood otorgó a la película un Oscar honorífico por la calidad del maquillaje gracias al trabajo de John Chambers, ya que la categoría de "Mejor maquillaje" aún no existía en 1969.


Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios

Fotografías del proceso de maquillaje de El planeta de los simios